Los que me conocéis en persona y los que podéis haceros una idea por lo que vais leyendo: SOY UN CULO INQUIETO o como me diría mi abuela que es mucho más fina que yo "soy muy callejera".
Aunque también tengo que decir que en mi casa estoy "más agusto que en brazos" pero sí, me encanta quedar con la gente, hablar, reír, achucharles, bailar, pasear... Y yo nunca he tenido fin.
Yo he sido de las de dormir dos horas y estar al día siguiente con toda mi energía porque la ocasión lo merecía (o porque tenía comida familiar), que he estado en casi dos sitios a la vez, que salía de fiesta con el cargador de móvil por sí se me alargaba la noche...y que a día de hoy no concibo un viernes en casa (Mery, sé que tu me entiendes).
Y ahora, que me da miedo ponerme malita y que los médicos no paran de repetirme que para evitar ponerme mala tengo que tomarme la vida con más tranquilidad me toca tener "ser madura" como le digo a mis amigas y saber decirme a mi misma que tengo que quedarme en casa y descansar.
Y es en esos momentos en los que soy más consciente de mi enfermedad y me pongo triste.
Por eso, el domingo pasado teniendo entradas para ir a ver a mi David Bisbal con Maria porque nos las regalaba mi amiga Paula...dije que no para descanso también de Ernesto, mis papis y la propia María quien me confesó que estaba preocupada sí iba por sí me alteraba y me daba uno de mis chunguis (que aún así me dio, pero en casa).
Y hoy me ha tocado decir no a la quedada navideña con mis amigos de la playa a los cuales llevo un montonazo sin ver. LO SIENTO MUCHÍSIMO CHICOS.
Pero ayer tuve mi día navideño con mis amigos de Rivas que se alargó hasta la noche y que me dejó absolutamente reventada. Así que hoy, cuando estaba apurando cada minuto que podía para dormir un rato me he dado cuenta de que debía quedarme en casa.
Pero me siento fatal. Primero porque necesito ver a mis amigos de la playa y la segunda porque en momentos así siento como que la enfermedad me gana (y necesitaba soltarlo).
Hoy me ha tocado el día regular en el que me pregunto a mi misma sí me gana la enfermedad. Aunque por otro lado me he dedicado a decorar mi casa para las Navidades, algo que me encanta.
Así que desde aquí le digo a mis amigos de la playa que quiero y necesito verles y que siento no haber ido hoy.
Y a los BUJARRAKAS... Que mil gracias por el día de ayer que son de los días que deseo enmarcar porque fue inolvidable!!